Indigenous group threatens collective suicide in Brazil 29th March

Una carta firmada por los líderes de la comunidad indígena Guarani-Kaiowá de Mato Grosso do Sul, anuncia el suicidio colectivo de 170 personas, (50 hombres, 50 mujeres y 70 niños), si se hace efectiva la orden de la Corte Federal para despojar a la tribu de la ‘cambará granja’ donde se encuentran temporalmente acampados.

Translation: A letter signed by the leaders of the indigenous Guarani-Kaiowá of Mato Grosso do Sul, announces the collective suicide of 170 people (50 men, 50 women and 70 children), to be effective if the Federal Court orders to strip the tribe of ‘cambará farm’ where are temporarily camped.

 

El territorio, que ellos llaman ‘tekoha’, que significa ‘cementerio ancestral’, ha sido sembrado con grandes plantaciones de caña de azúcar y soja, y está preparado para la cría de ganado.

Multa por vivir en su tierra

En caso de que los indígenas no desalojen la granja la orden federal estipula que la Fundación Nacional de Indios (Funai) tendrá que pagar una multa de aproximadamente 250 dólares por cada día que permanezcan allí.

Nosotros los indígenas tenemos el derecho constitucional a ocupar nuestra tierra, y vamos a seguir luchando“, enfatizó el jefe tribal guaraní, Vera Popygua, que exigió respeto para su pueblo, porque “ha sido masacrado“. “Han matado a nuestros líderes, y eso es triste e inaceptable. Somos una sociedad avanzada que vive en el siglo XXI. Esto no puede suceder, no debería ocurrir“, sostiene.

Si la orden judicial no fuera revocada, los indígenas amenazan con darse muerte ante el propio tribunal brasileño, después de lo cual exigen ser enterrados en su territorio sagrado, a orillas del río Hovy.

Los indígenas pidieron desde hace varios años la demarcación de sus tierras tradicionales, ahora ocupada por ganaderos y custodiado por hombres armados. El líder de la energía fotovoltaica en la Cámara de los Diputados, Sarney Filho, envió esta carta al ministro de Justicia, solicitando medidas para evitar la tragedia.

The territory, which they call ‘tekoha’ meaning ‘ancestral graveyard’, has been planted with large plantations of sugarcane and soybeans, and is ready for growing.

Penalty for living on their land

To avoid eviction from the indigenous farm, a federal order stipulates that the National Indian Foundation (Funai) has to pay a fine of approximately $250 for each day they remain there.

“We Indians have a constitutional right to occupy our land, and we will keep fighting,” emphasized Guarani tribal chief, Popygua Vera, who demanded respect for his people, because “it has been slaughtered.” “They killed our leaders, and that is sad and unacceptable. We are an advanced society living in the XXI century. This can not happen, should not happen,” he says.

If the court order is revoked, the Indigenous group threatened to commit collective suicide before the Brazilian court itself, after which it demands to be buried in sacred ground, the river Hovy.